Asfalto, nos vamos a dar un tiempo; Crónica del Maratón de Amsterdam

lunes, 3 de noviembre de 2014 21:39 By José Muñoz Sánchez

Juanma Lillo, de profesión entrenador de fútbol y de vocación filósofo, comentaba hace un tiempo en una tertulia deportiva, de esas que tanta pereza me producen, que el Barça de su amigo Pep Guardiola acababa de perder el partido de Champions contra el Chelsea por "fatiga cognitiva". Entonces, me resultó tan curioso el término que se me quedó grabado a fuego en la cabeza sin saber que unos años más tarde ese motivo sería por el cual yo acabaría haciendo una de las peores de carreras de mi vida en cuanto actitud y resultado se refiere. 



La fatiga cognitiva, explicado un poco a lo bruto, es cuando la cabeza dice basta debido a una continua carga cognitiva. Vale, muy bien, ¿y qué es una carga cognitiva? Pues cargas cognitivas suelen ser tareas que demanden mucha concentración o una demanda emocional muy alta. En mi caso esa serie de cargas yo se las atribuyo a dos hechos fundamentalmente: correr maratón de Valencia, maratón de Madrid, Trail de Peñalara, marató Pirineu y maratón de Amsterdam en el corto espacio de tiempo de 11 meses y al haber competido cuatro fines de semana seguidos en el último mes y medio pre-maratón. Si es que como dice mi hermano Rober, soy un ansias...

También tengo que decir que en ningún momento estuve metido en carrera, ni antes, ni durante, ni después. Esos típicos nervios que tienes antes de cualquier carrera de pueblo ese día no aparecían, y cuando eso ocurre... malo. 

Los días previos al maratón las sensaciones en los respectivos trotes eran geniales, estaba cómodo y con la sensación de creer haber hecho las cosas bien. La alimentación la cuidé en la medida de lo posible y la estrategia la llevaba bastante clara, bastante conservadora por cierto. Pero una vez en faena todo se torció desde el primer momento. Vale que no llegamos precisamente pronto a la salida, tan solo 30 minutos antes, pero bueno, estamos medio en hora, pero lo que no puede ser por parte de la organización (y es el único "pero" que les pongo) que un maratón IAAF Gold Label pretenda meter por la puerta de un estadio de 2x1,50 a 15.000 corredores. Cuando salieron los primeros yo ni siquiera había entrado en el estadio. ¿Cuál es el problema de esto? Que cuando te toca salir tienes que adelantar a 8000 personas por las calles de Amsterdam, que anchurosas no son precisamente. 

Por fin salgo y mi objetivo prioritario era poner la marcheta de 3'50''/km que tenía estipulada para los 10 primeros kilómetros, pero era imposible, solo podía ir a acelerones y frenazos. Hasta el km 13 no puedo ir agusto y encima es en la parte que más sopla el viento, bordeando el río Amstel. Me voy resguardando como puedo hasta el punto de giro que empieza a soplar de culo y voy más cómodo. Mientras tanto ya las plantas de los pies me estaban dando un poco la lata, y este es un tema que ya no se como acertar, la elección de zapatilla. En este maratón corrí con unas Nike Pegasus que son dos sofás de zapatillas y me empezaron a doler las plantas antes incluso que en Valencia que llevaba unas voladoras. 


Paso el medio maratón en 1h 23' y empiezo a echar cuentas: si adelantando a media Europa he pasado el medio en este tiempo, a poquito que fuerce la máquina a partir del km 35 hago marca personal. No eran cuentas de la lechera, iba bastante bien; los geles había entrado sin problema, ni atisbo de dolor de tripa ni calambres, tan solo las plantas me molestaban un poco, por lo que era bastante factible. Hasta que llegó el muro, esta vez en el km 30. La gente habla del km 35 como muro pero lo que no saben es que el muro es de Bilbao, y aparece donde quiere y como quiere. A mi me llego en forma psicológica no de pájara, ya que en ese momento que tienes que tirar de cabeza y corazón y no de piernas yo era incapaz de tirar de cabeza. Bajé el ritmo a ver si se me pasaba, pero nada, imposible. Llegué a hacer kilómetros enteros andando y luego cuando volvía a correr corría sin forzar a 4'20''/km, pero cuando venía otra recaída me echaba andar otra vez. Entré en una espiral de pasotismo que me daba igual marca y me daba igual estar corriendo en una de las ciudades más bonitas de Europa. "You can do it" me decían los amables holandeses, pero yo solo me reía y negaba con la cabeza. 


Pasan los lentos kilómetros  y ya estoy encarando el estadio olímpico, solo busco a Melani pero no la veo por ningún lado. Bajada y entro en el tartán afrontando los últimos 200 m de carrera, me quedo un poco empanado mirando a las gradas y llego a meta, más entero que un caballo sin capar y es que mierdear en los últimos 12 kilómetros es lo que tiene, que no te cansas. 3h 09' 10'' y otro maratón para el zurrón, es lo que me quedaba...

Mi hermano rebajó su marca 2' y sigue progresando, ósea que guay. En cuanto a mi, espero que esta carrera sirva como toque de atención para el año 2015 y aprenda de mis errores. De momento del asfalto me olvido y toca centrarse 100% en el monte, que es lo que de verdad me gusta y me motiva. 

Os dejo el enlace de mi track en Strava: http://www.strava.com/activities/210289978

¿Tu también lo has oído?; Crónica marató Pirineu

martes, 23 de septiembre de 2014 13:15 By José Muñoz Sánchez

Si la entrada de Peñalara se hizo de rogar casi tres meses, la de la Marató Pirineu viene calentita calentita, sacada del horno vamos.

Voy a sacar la vena de futuro docente que de vez en cuando me sale para informar un poco a grosso modo en que consiste la prueba.

A pesar de su nombre, la Marató Pirineu no transcurre por los Pirineos, sino que lo hace por la sierra del Cadí-Moixeró, que es un parque natural que está justo delante de los Pirineos, pero como dice el refrán, el perro es mío y lo llamo como quiero. Es la versión corta de la mítica carrera Cavalls del Vent, si, la misma que han cogido los de Salomon y han estrazado igual que a un cochino en la matanza, alargándola 20km y llamándola Ultra Pirineu. Los puristas dicen que se han cargado la carrera y viendo los “pros” inscritos puede ser cierto, pero lo que también es cierto es que la que montan a nivel de infraestructuras y despliegue de medios  es acojonante.


La Marató sale de Bagá, típico pueblo de montaña chulísimo, a la par que independentista (aunque ese tema me da un poco bastante igual) y llega 44 km – ¿no decías que era maratón? – y 2600 metros de desnivel positivo después a Bellver de la Cerdanya; pueblo que no tengo el gusto de conocer ya que cuando quise llegar llevaba los ojos vueltos.

                                     

Mi carrera se puede dividir en dos partes bien diferenciadas, la primera hasta el km 20 que es cuando yo estoy disputando la carrera y la segunda, después del km 20, que es cuando la carrera me disputa a mí.

A las 11.00 de la mañana se daba la salida en la plaza de Bagá, 600 corredores y corredoras dispuestos a sufrir como perros por el Cadí, 1250+ y un calor impropio de la época nos esperaban en tan solo 8 km, que para ponerlo en perspectiva es como si subes dos veces seguidas desde Navamorcuende a las antenas del Píelago. Callejeamos un poco y rápido me pongo en el grupo cabecero, y es entonces cuando decido que voy a arriesgar con la táctica de carrera. Por delante se van 3 corredores y no hacemos ni intentona de seguirles, y por detrás nos quedamos un grupo muy majo de 4 en el que llevamos un ritmo bastante bueno. A medida que vamos ganando altitud voy subiendo un poco el ritmo y los compañeros de viaje se quedan. Llego al control 1(km 8 y 1750m) en 4ª posición y con buenas piernas, pero es justo pasar el control y pego un pequeño brujulazo que me hace perder  la ventaja que llevaba al grupo de detrás. Cojo el camino correcto otra vez y voy solamente unos 10’’ por delante nada más. Intento no ponerme nervioso y seguir el ritmo que llevaba, pero aunque no quiera ya me modifica lo planeado. Al terminar la bajada terminan cogiéndome 2 corredores, hacemos juntos la subida al control 2 (km 14 y 2250m) y ahí ya se me van. En ese momento marcho en 7ª posición y me repito 1000 veces mentalmente que tengo que hacer top10 como sea.

Tras avituallarme en el control 2 y tras una pequeña bajada, comienza la subida al punto más alto de la carrera, el refugio Niu de l´Agila (km 20 y 2600 m). La hago tranquilo pero por detrás veo que se me está acercando gente por lo que una vez coronado, me tiro fuerte en la bajada. Y aquí es donde llega el punto de inflexión en la carrera. La bajada del Niu transcurre por una pista de esquí con una pendiente grandísima y a causa de tanto retener, los cuádriceps empiezan a decir que a donde voy. Me meto un buen chute de sales y parece que la cosa se tranquiliza, pero en cuanto levanto la pierna un poco más de lo normal vuelven a aparecer los calambres, por lo que ya cambio el chip de carrera totalmente y me mentalizo de que me va a pasar hasta el del carro de los helados.

Con más pena que gloria voy haciendo camino hasta llegar al control 4 (km27 y 1500m) y según llego veo al que iba 3º retirado y a otro que me ha pasado bajando dando voces por no sé qué del material, yo mientras a lo mío, no sin sacar un poco la cara por la voluntaria a la que estaba dando voces, y es que el material obligatorio llevaba publicado cerca de 4 meses. Termino la bajada y llego a la última subida, la cual ya hago andando completamente. Ya no solo eran los cuádriceps, a la fiesta también se habían sumado los gemelos, los isquios y atención ¡los abdominales!, poniendo de manifiesto la falta de trabajo del CORE que llevo desde el inicio de temporada (soy un gañan Arri, lo sé).

Termino la bajada y ya solo queda la subida final con su correspondiente bajada a meta. Se me hace eterno hasta que llego al último control de paso, el 5 (km33 y 1800m). Entre medias me ha dado tiempo a pararme en un pilón a beber, a coger un par de palos y usarlos como bastones, a poner y quitar la música 30 veces, ¡ya no sabía ni lo que hacer!, me faltó sacar el móvil y ponerme a jugar al Candy.

Comienza la bajada a meta y ya no es que me la tome con calma, es que hay tramos de bajada que no puedo ni correr por miedo a que se suba todo, pero ya entré en una espiral que me daba todo igual, solo quería llegar. En 10 km de bajada me pasan 7 corredores y ojo,  ¡la primera clasificada!, es la primera vez en una carrera que no sea maratón de asfalto que me pasa la primera clasificada femenina, y lo digo desde la admiración eh, que conste, que la chica iba como un tiro.

                                      

Por fin vislumbro la meta y la sensación esta vez fue de alivio, ni alegría ni dolor (que lo había y mucho) ni nada, solamente alivio de poner fin al calvario que estaba pasando. Puesto 16º general y no se cual senior todavía, y tampoco me interesa. Lo que sí que me interesa es que la lección está bien aprendida y es que hasta que no te pegas de frente contra la pared no te das cuenta de lo que duele, por mucho que te hayan avisado de que es hormigón.




Haciendo autocrítica, tenía un top 5 en las piernas si no hubiera hecho el imbécil saliendo tan fuerte, así como no hubiera penado tanto a nivel muscular si hubiera llevado el trabajo de fuerza al día. Espero que para la próxima no me pase.

Y por último no quería cerrar la entrada sin agradecer a los que en mayor o menor medida han hecho posible que pudiera correr esta carrera, Melani, Adri, Pepe y Merca, ¡GRACIES! Y mención también para el gran Javi Bikila, que me acompañó, corrió y finalizó la prueba, quitándose un poco la espinita del GTP.

Dentro de un mes estaremos de vuelta con la entrada del Amsterdam Marathon, si no hay alguna sorpresa antes…


No te flipes Pepito; Crónica de Peñalara

jueves, 18 de septiembre de 2014 19:01 By José Muñoz Sánchez

Puede parecer un tópico, pero os juro por la gloria de mi madre, que diría el gran Chiquito, que tenía la crónica hecha 3 días después de la carrera y justo cuando estaba poniendo las fotos, el ordenador se fue a la mierda, llevándose consigo la entrada correspondiente al tema que acontece. Después de cagarme en todo lo cagable me dispuse a reanudarla, pero me aburrí y lo dejé. Hasta hoy.


                                    

Puede venir hasta bien que haya pasado cierto tiempo, aunque pueda que se pierda algún detalle por el camino.

Podría empezar la crónica con lo típico de “es el mayor reto al que me he enfrentado en mi vida deportiva” o “por fin soy ultrafinisher”, pero no, no es mi estilo. Bien es verdad que acabar una carrera tan larga mola pero tampoco es una cosa que te cambie la vida (deportiva). Viene bien para poner en perspectiva ciertas carreras, pero nada más. De hecho, personalmente, me parece más duro preparar y correr un maratón de asfalto que correr 64km por monte haciendo 2500 metros de desnivel positivo. La prueba más evidente es que al día siguiente estaba montando en bici de montaña, y en cambio después de un maratón de asfalto sabes que en los siguientes 3 días te puedes olvidar de andar dignamente.
Al lío, que me voy por las ramas.  Me ceñiré a lo deportivo únicamente, para no aburrir al personal más que nada.

Después de pasar el control de chip me coloco en primera línea de salida, al lado de dos mindundis como son Luisete y Castán, que para estar atrás tiempo habrá, me digo. Suena el disparo de salida y la gente sale como si se fuera a acabar la carrera a los 200m, ¡pero muchachos, que son 63km! Yo no entro al trapo y voy a lo mío. Si una cosa me han dicho todos los veteranos a los que he consultado es que vaya guardando mucho, que aunque sea corrible vaya con el freno de mano echado ya que lo puedo pagar y de lo lindo en la parte final. El primer escollo a franquear es el puerto de La Morcuera, subida muy corrible de unos 14 km. Subo tranquilo con un chico de Córdoba hasta casi coronar, que es donde le suelto y cojo a Luisiete. Allí estaban Melani, Marta y Mercedes dando ánimos y me cantan que voy segundo, y es cuando empiezo a flipar en colores. Empecé a pensar si es que las estaba afectando la altitud, pero en la bajada a Rascafría comprobé que tenían razón, que el paquete delantero se había perdido con Castán a la cabeza. De flipar la pasada que me metió bajando ¡qué clase! Me quitó las pegatinas y también se llevó a Luisete, y haciendo caso otra vez al mantra que me estaba repitiendo en mi cabeza continuamente, el de “no te flipes Pepito”, los dejo irse. Casi llegando al avituallamiento me pasa otro chico, segundo de la carrera a la postre.

Ya en el avituallamiento de Rascafría (KM 25) relleno bidones, como algo rápido, me hacen control de material y ¡pa’ rriba! 20 km de subida y 1300 metros de desnivel positivo me esperan hasta el pico de Peñalara, puerto del Reventón mediante. Aquí si tengo que reconocer que hay que ser un poco duro de coco, ya que si lo piensas tranquilamente es una puta barbaridad tener que hacer en medio de una carrera la misma distancia y desnivel que en mis mejores entrenamientos. Y si, solo un día he pasado de los 20 km y ninguno de los 1200+, pero preparar una carrera así en Toledo es lo que tiene.
Poco a poco voy haciendo camino hasta que a mitad de puerto cojo a Luisete otra vez, hago 5-10’ con él y me voy ya que me dice que anda saliendo de una lesión y que tire yo para delante. Con el Reventón en el horizonte veo que vienen por detrás dos chavales a un ritmo muy majo y barrunto que deben de ser dos de los que se perdieron al principio. Efectivamente, me pasan y les digo adiós educadamente, sigo a lo mío. Meadita de rigor y llego al Reventón, como algo de fruta ya que el estómago me dice que le dé un poco de tregua con las barritas y arreo para Peñalara. Si la matemática no falla voy quinto y con muy buenas piernas, por lo que me centro en mantener la posición y si hay alguna explosión por delante pues eso que me llevo.


Entre canción y canción del iPod llego al famoso paso de los Claveles y entre que técnicamente soy malísimo y que me relajo un poco llega el sexto clasificado y me pasa, le cojo al coronar Peñalara (KM 45) pero en la bajada le dejo irse, entre otra cosas porque lleva mucho mejor ritmo que yo y mis tobillos no están para florituras. Cuando quiero acordar estoy en las zetas de la bajada al puerto de Cotos ya en sexta posición. Al terminar la bajada hay otro avituallamiento y lo más importante, está mi gente allí. En este sí que me paro bien ya que todavía queda subir a “la Bola del mundo”. Como en abundancia y bebo todavía más, que en la subida a Peñalara había fundido todo el agua. Hablo un poco con Melani y con Adri y otra vez para arriba, pero ya es la última subida y ese yo creo que es el aliciente que me hace seguir. De Cotos a la Bola son 6 km y 400+ nada más, pero con la tralla que llevas de antes se hacen interminables. Además a medida que voy subiendo voy viendo que el séptimo clasificado se va acercando cada vez más, y en los sitios que yo voy andando él va corriendo. Se acerca tanto que justo al coronar solo hay 10’’ de diferencia entre ambos, por lo que me tiro a muerte la última bajada, hay que conservar la sexta posición como sea. El tío subía bien, pero bajaba horrible, y en el primer trozo todavía de cemento (el que se sube en la Vuelta) le meto buena distancia, por lo que ya me relajo un poco. Me relajo entre comillas porque el último trozo desde que acaban los pinos hasta meta me salen a 4’/km pelaos, incluso por debajo, pero es que cuando se va oliendo la meta hay que dar todo ya. Llego a meta totalmente destruido muscularmente y no sé si reír, llorar o gritar, así que opto por sentarme y quedarme callado asimilando lo que acabo de hacer, sexto general y quinto senior en mi primera carrera de larga distancia. Not bad…

Para mí es un gran resultado, y viéndolo con el tiempo todavía más, pero siempre queda el poso,  de si hubiera tenido otras circunstancias el mes previo a la carrera que hubiese sido capaz de hacer. Quizá el año que viene lo comprobemos….





XII CARRERA DE MOUNTAIN BIKE DE PEPINO PUNTUABLE PARA SENDA VIRIATO

martes, 12 de agosto de 2014 10:47 By José Muñoz Sánchez

Os dejo por aquí la información básica de la XII Carrera de Mountain Bike de Pepino. Este año presenta dos grandes novedades:

 - La salida es en frente del restaurante Casa Gerardo, por lo que no os tendréis que enfrentar a la temida inhumana de subida.
 - Hemos abierto un tramo nuevo, la bajada del Cerro Moro, el cual ya está abierto para que vayáis haciendo vereda. Se coge en la última parte de la subida del desguace girando a la derecha.


En cuanto a las categorías, serán las mismas que se vienen utilizando en todo el circuito Senda Viriato. Por si acaso las dejo por aquí:

o Féminas; englobando a todas las edades.
o Cadetes; nacidos en 1999 y años posteriores.
o Júnior; nacidos desde 1995 hasta 1998.
o Elite; nacidos desde 1985 hasta 1994, y los que quieran de otra categoría.
o Máster 30; nacidos desde 1975 hasta 1984.
o Master 40; nacidos desde 1965 hasta 1974.
o Veteranos A; nacidos desde 1959 hasta 1964.
o Veteranos B; nacidos en 1958 o anteriormente.

La inscripción será de 12€ hasta el viernes previo a la prueba y de 15€ el mismo día de ésta. 

El número de vueltas por categoría está por determinar todavía. 

(Perfil y mapa)

Os dejo el enlace en Strava: http://www.strava.com/activities/168035240

Reglamento I Carrera de media Montaña Subida al Cerro Moro

lunes, 5 de mayo de 2014 11:43 By José Muñoz Sánchez

Os dejo el reglamento por el cual se rige la prueba:

FECHA Y LUGAR:

La I Carrera de Media Montaña Subida al Cerro Moro se llevará a cabo en la localidad toledana de Pepino, el día 1 de Junio de 2014 a las 10:30 de la mañana, siendo la salida en la plaza del pueblo.

RECORRIDO:

El recorrido de la prueba transcurre en su totalidad por los montes de Pepino, transitando por ambas vertientes de los cerros que forman el pequeño valle donde está enclavada la población.
 
PARTICIPACIÓN:
Pueden tomar parte en la prueba todas las personas con 16 años en adelante, haciéndose responsables de poseer las capacidades físicas adecuadas para desarrollar la carrera sin ningún riesgo físico para su salud.

CATEGORÍAS:

Se han establecido las siguientes:

-       Promesa M y F (16-19 años)
-       Senior  M y F (20- 34 años)
-       Veteranos I M y F (35- 44 años)
-       Veteranos II M y F (45 años en adelante)

INSCRIPCIONES:

Se realizarán a través del formulario colgado en la WEB de www.anticiclón.es/eventos hasta un máximo de 200 CORREDORES.

También se podrán hacer inscripciones de forma presencial en Ciclos Keway (Talavera) y Bikila (Toledo).

El plazo definitivo para inscribirse será el 30 de mayo de 2014.

PRECIO:

Será de 12€

El importe de la inscripción da derecho a participar en la prueba, seguro de responsabilidad civil y de accidentes y al disfrute de todos los servicios establecidos por la organización para los participantes, así como la bolsa del corredor.

SEÑALIZACIÓN:

El recorrido estará debidamente señalizado con cinta, flechas pintadas en el suelo y carteles, así como habrá responsables de la organización en los puntos que puedan llegar a ser más conflictivos como puedan ser cruces y zonas peligrosas.

CONTROLES:

En la prueba existirán 3 controles de paso obligatorios para todos los participantes:

1º control de paso: merendero

2º control paso: Geleña

3º control paso: Cerro Moro


AVITUALLAMIENTOS:

La prueba contará con 2 avituallamientos líquidos que corresponden a los puntos:

-       Avituallamiento 1: Merendero
-       Avituallamiento 2: alto de la inhumana


PREMIOS:

Todos los participantes  tendrán de regalo una gran bolsa del corredor.

Y los premios para los ganadores son los siguientes:

-       Trofeo para los 3 primeros clasificados y clasificadas  de cada categoría.
-       Jamón, queso, lomo, chorizo y salchichón  respectivamente para los 5 primeros clasificados de la general masculina y femenina.


PLANNING DE LA PRUEBA

9.00 Recogida de dorsales en la plaza del pueblo
10.30 Salida en la plaza del pueblo
13.00 Cierre de Meta




SERVICIOS A LOS PARTICIPANTES

Además de la contratación de los seguros de Responsabilidad Civil y Accidentes, la organización dispondrá de los siguientes servicios:

·         Guardarropa: La organización dispondrá de un guardarropa para los participantes.

·         Duchas: En la piscina municipal.

·         Aseos y sala vestuario: en la piscina municipal.

MEDIO AMBIENTE:
Por respeto hacia el medio natural en el que se lleva a cabo la prueba, se ruega a los participantes que los envoltorios de barritas, geles o similares, sean guardados hasta el final de la prueba para luego depositarlos en un lugar adecuado para tal uso.

SEGURIDAD:
La organización se reserva el derecho de desviar la carrera por un recorrido alternativo y realizar las modificaciones necesarias que considere en función de los diferentes condicionantes, así como la suspensión de la prueba si las condiciones meteorológicas lo obligan o por fuerza mayor. Siempre previo acuerdo del Comité de Carrera.


AUXILIO EN ACCIDENTES:
Los participantes están obligados a auxiliar a los accidentados que necesiten ayuda, así como a informar de cualquier percance en los controles de paso.  

RESPONSABILIDAD:
La organización declina toda responsabilidad en caso de accidente, negligencia, así como de los objetos de cada participante. Los participantes serán responsables de todo perjuicio que puedan causarse a sí mismos y a terceros

ACEPTACIÓN DEL REGLAMENTO:


Todos los participantes por el hecho de formar parte en esta prueba, aceptan el presente reglamento, así como el reglamento de la Federación Española de Montaña y Escalada. Al mismo tiempo que aceptan y dan su consentimiento para hacer públicas las fotos de la carrera en cualquier medio de comunicación. De no ser así, deberán avisar a la organización, para eliminar las fotos e imágenes en las que aparecen para que no sean publicadas.

Seny, pit i collons.

lunes, 28 de abril de 2014 17:52 By José Muñoz Sánchez

Aviso al lector: el título de la entrada nada tiene que ver con el malogrado Tito Vilanova, pero es una frase que bien define mi aventura en el maratón de Madrid. 


Antes de bombardear el blog con información relativa a la carrera de media montaña que haré dentro de un mes, he querido hacer la crónica de MAPOMA en caliente al igual que hice la del maratón de Valencia, más que nada para que no se pierda ningún detalle en el transcurso que se me van yendo las agujetas que ahora mismo inundan mi cuerpo. 

Vamos a dividirla en tres partes:

PRE-MARATÓN 

Las sensaciones eran geniales, después de bastante tiempo parecía que todo estaba en su sitio, el cíático me había dejado de dar la lata, la alergia incomodaba pero no molestaba y las temperaturas habían bajado un poco, que es lo que a mi me va bien. También tengo que decir que el hecho de que la semana santa haya caído justo una semana antes no me ha beneficiado nada, y no precisamente por lo devoto que soy, pero los botellines y el correr me gustan a partes iguales. El viernes santo fue de aúpa. 
Al ser en Madrid y hospedarme en casa de mi hermano, por esta vez podría evitar los típicos paseos turísticos que tan pegadas dejan a las piernas, así como también podría comer decentemente los dos días de antes. Son cosas que se agradecen a la hora de competir.

MARATÓN 

El 174 iba a ser el "hierro" que llevara, lo que me iba a permitir salir en el cajón 1 y así no tener problemas a la hora de fijar la marcheta que me había marcado de antemano. Eso decía la teoría. La realidad es que fácilmente me tocó adelantar a 500 personas Castellana arriba ya que se habían metido en el cajón que los salió de las narices (un saludo a la organización), más que nada porque no había control alguno, cosa que en Valencia si que hubo. 

Poco a poco voy cogiendo ritmo de crucero en torno a 3'55''-4'/km hasta que llega la primera bajada que me dejo llevar un poco más, pero controlando en todo momento, con la mente puesta siempre en el final del recorrido. En el km 15 me meto en una grupeta de 8-10 unidades en la que llevamos un ritmo muy majo (3'50''/km) que viendo los continuos toboganes que hay está bastante bien.   

                                       

(En esta parte de la carrera tengo que hacer un inciso para mencionar el paso por Gran Vía - Callao - Preciados - Sol. Simplemente acojonante. Se me pusieron los pelos de punta con el pasillo humano que había). 

Vamos haciendo camino poco a poco hasta que llegamos a la temida Casa de Campo, que por fin supe por qué la gente que ha corrido MAPOMA tiene tanto asco a esta parte, y es que no aporta absolutamente nada a la carrera, bueno si, aporta dos repechos los cuales fueron los culpables de que pegara el petardazo que pegué. El primer repecho sobre el km 27 me hizo descolgarme del grupo y el segundo en el km 30 me hizo reventar del todo. A partir de ahí, sumado al batiburrillo estomacal que llevaba solo pensaba en abandonar, de hecho pregunté a 2 personas si tenían kleenex para hacer un pit stop de emergencia, pero la respuesta fe negativa y opté por seguir hasta que la cabeza (o el intestino grueso) me dijeran basta. 

Van cayendo kilómetros mientras el ritmo decrece bastante y el cerebro, que es más listo que el hambre, empieza a descontar kms, es decir, a echar la cuenta de los que faltan, en vez de sumar los que lleva. ¡Qué jodío este cerebro! ¡cómo me engaña! Así me planto en el Manzanares y echo un vistazo al perfil del recorrido que llevaba en el bolsillo y se confirman mis presentimientos, de ahí hasta meta es todo subida, así que con paciencia y saliva.... Cómo me vería un patinador de la organización, de esos que llevan vaselina y réflex, que me dijo amablemente ¿quieres réflex? Muy amablemente también le contesté que lo que me pasaba a mi no se curaba con réflex, se río y me dio ánimos. 

Km 40, ya solo quedan 2 km de "bajada" que curiosamente me machacan más que los de subida, y es que al igual que en Valencia llevo las plantas de los pies destrozadas por las ampollas, situación que achaqué aquella vez a las zapatillas excesivamente voladoras y que a la postre ha resultado una acusación falsa, ya que con las Asics Noosa que corrí ayer me ocurrió incluso antes. Los dos últimos kilómetros ni los disfruté, iba tan sumamente jodido que no tuve el placer de poder disfrutarlos, cosa que en Valencia si que ocurrió. Será por aquello de la primera vez... El reloj marcaba 2h 53' 06'', que al oficializarlo será un poquito menos. 

POST-MARATÓN

Dolor, mucho dolor, de tripa, de piernas, de pies y un poquito de corazón por haber fallado en la estrategia otra vez, y van dos veces ya. 

Los que no fallaron fueron mi hermano Roberto, Jacobo y Juanjo Miranda, que hicieron tres marcones.

Para acabar quiero dar las gracias a toda la gente que se volcó y se está volcando en Facebook y Twitter, y por supuesto a mis dos patrocinadores Ciclos Keway (Pepe), Fisaude (Jorge) y al míster Arri, que un día me tendrá que explicar los puzzles que hace para cuadrar todo lo que le propongo. A mi familia no le doy las gracias porque ya lo saben :) 





PD: para los más curiosos os dejo todos los parciales en una foto. Ya sabéis que aquí no hay secretos. 

                                                       
                                                                               

Barruntando MAPOMA

miércoles, 9 de abril de 2014 10:28 By José Muñoz Sánchez

barruntar 

  1. tr. Conjeturar, presentir una cosa por algún ligero indicio

Terminada la carrera de Guadalupe, había que ir a por la segunda parte del díptico de Extremadura, el medio maratón Subida al Camorro, en la localidad extremeña de Castañar de Ibor.

 Mis presentimientos sobre el perfil de la carrera se cumplieron y he de decir que a pesar del resultado final me aburrí mucho en carrera, y eso que llevaba música, pero os aconsejo que si salís a disputar una carrera no llevéis mp3, es imposible concentrarse, de hecho el mío fue el 80% de la prueba apagado. En cuanto al perfil de la prueba, 4 km muy duros y muy bonitos de salida, seguido de 2 km de cresteo digamos, para seguir con (atención) ¡¡¡¡ 12 km !!! de bajada, todo por pista y tendida además para acabar con una tachuela de 3 km que llevaba a meta. ¿Mi carrera? Esta vez salí algo rápido para evitar que se marchara el grupo de cabeza de salida y luego tener que matarme a remar por detrás. Me coloco primero hasta el km 2, donde me pasa un corredor bastante ágil y con bastante buena pinta, le dejo pasar que por ahora esa no era mi guerra. En el km 4 me coge otro corredor que ya conocía de Guadalupe y que quedó justo por detrás de mi, así que me pego a él que esa si que es mi guerra. Coronamos juntos y en los primeros km de bajada me veo que no voy fino por lo que le digo que tire él que hoy no puedo ni con mi alma al tener que correr rápido (íbamos bajando a 3'10''/km). Huelga decir que no puedo con mi alma porque 48 h antes de una carrera no se puede hacer el cabra por el Piélago (un saludo a los Runners de Pueblo), pero bueno es lo que tenemos los artistas. Desde que me sueltan hasta meta poca historia, mucho aburrimiento por las pistas y regulando lo máximo posible en la tachuela final para no gastar mucho con miras a la semana de entrenamiento que me esperaba. Al final 3º en meta y 1º Senior, Debuti. La organización muy bien, de 10. 


Después de esta carrera y tras meditarlo mucho decidí descansar de competir el fin de semana siguiente, pensando en el Trail de Toledo  y muy a mi pesar me tuve que perder el Duatlón Cros de Mejorada, el cual he ganado en 2012 y 2013. Además como soy un poco masoca me acerqué a verlo para que me dieran un poco de envidia mis compañeros, pero no envidia sana, no, de la mala. 

Una vez ya en Toledo, y tras una semana un poco atípica en la que hubo tiempo para tomarse alguna copilla e incluso trabajar, tomaba la salida en la primera prueba del circuito Green Running Trail Series. Aquí tengo que hacer un inciso y es que no se puede llamar "trail" o "de montaña" a cualquiera carrera que toque algo de monte, y menos a una que el 30% es asfalto y solamente acumula 400 metros de desnivel en 19 km. Las cosas por su nombre, y si tengo un gato grande le llamo gato grande, y no tigre o pantera. No se si me explico. 

No voy a entrar en polémica en cuanto al tema organizativo, solo diré que se tiene que mejorar (y mucho) en las pruebas restantes del circuito, a las cuales asistiré seguramente. 

En lo deportivo, "solo ride" por mi parte desde salida, apretando en las subidas y sin jugármela en las bajadas. Es de justicia decir que no completé la totalidad del recorrido, ya que en el último km algún "gracioso" cortó una cinta que impedía el paso y yo pues me la salté, quitándome 600m de recorrido, aunque creo que llevaba ventaja suficiente para haberlos cubierto con total normalidad y no variar la posición. 1º senior, 1º general, una espada y un estudio de la pisada + plantillas en Podoactiva. Debuti (bis). 


Tocaba pensar en el Cros de Cebreros, pero pensando un poquito con la cabeza, valga la redundancia, y en vista de que en no mucho tiempo está el MAPOMA a la vista, decido con el míster dejar Cebreros a un ladito y seguir entrenando bien, ya que correr 3 medios maratones de "montaña" en un mes muy bueno no es. Por lo que aproveché el finde para ver a mi hermano y a Jacobo en el medio maratón de Madrid y meter dos buenos entrenamientos de calidad y volumen por la casa de campo, la ostia para entrenar por cierto.

 Para acabar tengo que decir que ya me llegó el material de Fisaude con el que competiré y recuperaré durante esta temporada. Las mallas rojas compressport son un caramelito y espero que den mucha guerra por Peñalara el 28 de Junio. 

Ya solamente a pensar en los 42 K de Madrid ... 

Abrazos a los varones y besos a las féminas. 






¡ Ay Guadalupita !

lunes, 24 de febrero de 2014 21:44 By José Muñoz Sánchez

El día llegó, y ahí estuvimos 456 curvas después, en Guadalupe, provincia de Cáceres. La cita escogida para debutar en carreras por montaña este año fue la media maratón de montaña Villa de Gudalupe, que no deja de ser paradójico que se llame así, ya que desde mi punto de vista ni es una media maratón (22km) y ni es de montaña, y es que le pasa un poco como a Puertollano ¿no? que ni es puerto ni es llano.


Lo primero que hay que decir es que la organización estuvo muy bien salvo alguna cosa, que diría Rajoy. El precio no era desorbitado, había guardarropa, circuito bien señalizado, buen post-carrera, etc. Lo que tiene que ser normal para todas las carreras vaya, pero que muchas veces estos servicios brillan por su ausencia. Lo que no puede ser es que se tarde tanto en sacar unas clasificaciones y para más inri corriendo con chip. Y lo que tampoco puede ser es que a la hora de dar los premios te llame el de la organización y te diga mirando a la mesa de trofeos "elige uno y rapidito, que tengo que llamar a los demás a podio", en diez años que llevo compitiendo no había visto esto en la vida. Pero como decía antes, por lo demás genial, y este pequeño percance no tiene que quitar mérito a todo lo que hicieron bien, que fue la mayoría de cosas.


Vayamos al grano con lo deportivo, que es lo realmente interesante de la entrada. 

Mi carrera fue de menos a más, con una pequeña dosis de suicidio al final, ya que en los 22 km ni comí ni bebí nada y a punto estuve de pagarlo. 

Decía en la introducción que no era ni media ni de montaña y es que en una carrera de 22 km en la que el ganador saca una media por debajo de 4'/km, muy de montaña no es. Este tipo de carreras rápidas no me benefician nada, pero hay que torear en todas las plazas. Se sale muy rápido y cuesta abajo para después coger un tramo de vía verde de 4 km aproximadamente. Ahí ya se me fue la carrera, pero yo era consciente de que si salía con los de delante iba a penar mucho, así que me mantengo sobre la undécima posición esperando que llegue el desnivel, que hasta el km 6 no iba a ocurrir. Ahí ya se vieron los primeros fuegos de artificio de algún valiente que salió a porta gayola. Yo a lo mío, remontando poco a poco sin cebarme, así me coloco el séptimo en la primera cuesta. Llega la primera bajada y al ser 0 técnica paso a otro corredor. Del km 10 al 16 había visto en el perfil que era todo subida, aunque muy tendida, por lo que fuerzo un poco la maquinaria. A mitad de cuesta me coloco 4º, pero en lo que queda tampoco saco mucho al 5º y le voy manteniendo a 20'' más o menos. Llega otra bajada, 0  técnica también, y me tiro a muerte, y oh sorpresa le meto otro poquito al 5º. Y aquí es donde viene la jaimitada del día, quedaba un repecho de 1,5 km que me habían avisado que era duro pero debe ser que forcé de más bajando y sumado a que ni comí ni bebí, tuve un atisbo de pájara muy serio, de hecho el 5º que venía a 40'' me llega a coger ya que había decidido subir andando y guardar un poco para la bajada. Coronamos juntos y echo todo en la bajada. Al final le meto 30'' en 2 km de bajada y entro en meta 4º y 3º senior con un tiempo de 1h29'04''. Podéis consultar clasificaciones aquí. 

Sensaciones en general buenas, ya que he evolucionado algo en las bajadas y ya no me echo a andar tan pronto. Ahora hay que seguir entrenando y ya veremos si me da por correr la de Castañar de Ibor, que he visto el perfil y no me termina de rematar. Ya veremos...

                                       

Venga, que esto empieza

martes, 11 de febrero de 2014 13:34 By José Muñoz Sánchez

Si os dijera que no tengo ganas de pincharme un dorsal en el pecho os estaría mintiendo igual que un bellaco y es que desde el 10.00 de la OID en Talavera ya ha llovido un poco, vaya que si ha llovido...

El debut oficial será dentro de 15 días, en la media maratón de montaña de Guadalupe, y el debut oficioso en la popular carrera de Las Latas de Cervera, este sábado,  a la cual os animo a ir ya que el precio es insignificante (1 euro y 1kg de comida para Cáritas) y la organización es exquisita. Seguramente llegue a las dos carreras cargado pero es lo que toca si se quiere estar fuerte en mayo-junio, aun así lo daré todo en ambas como siempre, ya que para el que es picado (en el buen sentido de la palabra) y competitivo como lo es un servidor, no hay romerías que valgan.




También os dejo el calendario que tengo pensado hacer, el cual es muy "low cost" en el sentido de que he elegido carreras que no estén muy lejos para no gastar mucho en gasolina y es que la suerte de que las carreras por montaña estén de moda es que pegas una patada a un tomillo y salen 4 o 5.


  • 15 febrero, Cervera de los Montes, Toledo, Las Latas, 6km.
  • 23 febrero, Guadalupe, Cáceres, Medio Maratón de Montaña, 21 km.
  • 1 marzo, Castillo de Bayuela, Toledo, El Chorizo gordo, 6-7 km. 
  • 9 marzo, Castañar de Ibor, Cáceres, Medio Maratón de Montaña, 21 km.
  • 23 marzo, Toledo, Toledo, Green Trail Series, 19 km.
  • 7 abril, Cebreros, Ávila, Cross de Cebreros, 21 km. 
  • 14 abril, Hoyos de Manzanares, Madrid, Races Trail Running, 11 km.
  • 27 abril, Madrid, Madrid, MAPOMA, 42 km. 
  • 18 mayo, Villa de Mombeltrán, Ávila, Green Trail Series
  • 26 mayo, Los Yébenes, Toledo, 14,4 km.
  • 15 junio, Navahermosa, Toledo, Green Trail Series. 
  • 29 junio, Rascafría, Madrid, TRAIL PEÑALARA, 60 km. 
De todas estas fechas que pongo alguna no las llegaré a correr ya que coincidirán con exámenes o con eventos de última hora, así como saldrá alguna carrera que si corra a última hora, pero como podéis ver, no está del todo mal el calendario. Si alguien se anima a acompañarme alguna y así compartir gastos, bienvenido sea. 

En otro orden de cosas, como habéis podido ver en el margen superior derecho de esta pantalla ha desaparecido la imagen del equipo de triatlón EXTERMIN-SONSECA, la causa no es otra que este año como ya dije no me voy a federar en triatlón. Solo darles las gracias por estos dos años que me han tratado de cine casi sin conocerme y encima me llevo un buen puñado de amigos. 



En lugar de esa imagen aparece otra, FISAUDE que no sé ni como catalogar a lo que se dedica ya que ofrece 1000 servicios. Me ceñiré a lo que me dijo su responsable Jorge Blanco, es una tienda orientada a la fisioterapia y a la salud, pero podéis encontrar desde materiales para gimnasios, para colegios, para fisioterapeutas, para entrenadores, etc. Solo tenéis que visitar su página web www.fisaude.com e ir al apartado TIENDA. Como puse en Facebook, ni soy profesional ni pretendo serlo, pero es de agradecer que empresas como la de Jorge confíen en deportistas amateurs para ayudarlos en el desarrollo de la práctica deportiva.¡¡ MUCHAS GRACIAS!! Aunque es de justicia decir que para llegar a este pequeño acuerdo mucho ha tenido que ver mi amigo Jacobo, Valencia maratón "finisher" y futuro Madrid maratón "finisher". ¡Muchas gracias también!